Por: Julián David Vargas Ortiz – Estudiante de
Comunicación Social y Periodismo de la Universidad Surcolombiana.
Cortesía - Escuela de Suboficiales. |
Todo
está dicho y lo único que resta de acá al próximo domingo 25 de mayo es
esperar. Colombia se encuentra a la expectativa de saber quién guiará sus arcas en los próximos 4 años. Las aspiraciones de todos los candidatos presidenciales han entrado en una etapa definitiva y sólo hasta que se cierre
la última mesa de votación, sabremos qué pasará con el futuro del territorio.
Precisamente,
uno de los postulantes es Juan Manuel Santos Calderón, actual Presidente de la
República, quien hoy por hoy busca darle continuidad a su Plan Nacional de Desarrollo ‘Prosperidad para Todos’ y seguir así durante otro período en la
Casa de Nariño. Según algunas investigaciones, él se preparó de la mejor forma
toda su vida para ser el máximo jefe de un país, siguiendo los pasos de su tío-abuelo Eduardo Santos, quien fue mandatario entre los años 1938 y 1942.
Juan Manuel Santos nació el 10 de agosto de 1951 en el seno de una familia muy
pudiente de la capital colombiana. A los 16 años, después de pasar por varios
colegios, incluyendo el San Carlos de Bogotá, se inscribió a la Armada
Nacional como cadete. Allí aprendió a ser disciplinado, metódico y respetuoso
de las jerarquías militares. Posteriormente, continuó con su educación fuera del
país: estudió economía y administración de empresas en la Universidad de Kansas
en Estados Unidos, y realizó posgrados en Economía, Derecho Económico y
Administración Pública en la Escuela de Economía de Londres y la Universidad de
Harvard.
Luego
de laborar por mucho tiempo en el sector público, Santos Calderón dio el salto
a la política en 1991, gracias al entonces Presidente César Gaviria Trujillo.
Éste, confiando plenamente en las capacidades de Juan Manuel, lo colocó como
Ministro de Comercio Exterior. Dicho cargo era clave debido al impulso que
Gaviria le daba para que ocurriera una rápida y factible apertura económica de Colombia con el mundo. Ya como Ministro firmó los primeros
tratados de comercio exterior como el G-3 con México y Venezuela. Santos duró
sólo 3 años en el ministerio, pues con la llegada de Ernesto Samper Pizano,
salió del puesto.
Cuando
comenzó la era de Álvaro Uribe Vélez, ‘JuanMa’ hacía parte del Partido Liberal.
En aquel tiempo, apoyó la candidatura de Horacio Serpa, criticó duramente la reelección
e intentó presidir el Partido, pero al final César Gaviria se quedó con la
curul. Insatisfecho por lo acontecido, Santos decide en el año 2005 crear el
Partido de la U.
Acto
seguido y posicionado ya como un admirable líder político, Uribe Vélez le concede
el Ministerio de Defensa el 19 de Julio de 2006, para que avance en el proyecto
de Seguridad Democrática. Si bien en mencionado cargo fue contundente con las FARC,
dando de baja a ‘Raúl Reyes’, y llevando a cabo la memorable Operación Jaque,
Juan Manuel fue centro de muchos escándalos, especialmente el de los falsos positivos, asesinatos selectivos y demás, pero nunca aceptó la
responsabilidad por la acciones de sus subordinados.
Cortesía - Periódico El Universal. |
Caída
la segunda reelección de Uribe, Santos se hace a un lado del Ministerio y
anuncia su candidatura presidencial por el Partido de la U. Como jefe de
estado, ha desarrollado una insaciable agenda de reformas, entre las que se
incluyen la ley de víctimas, ordenamiento territorial, reformar a las regalías,
etc. Pese a lo anterior, su gobierno ha vivido complicados momentos de tensión
social, entre los que se destacan el Paro Agrario y la reforma a la Ley 30. Empero,
con el propósito de prolongar sus programas, concluyó lanzarse a la reelección
para el período 2014-2018.
Recuerda que la infografía brinda información relevante y complementaria, lo digo porque solo haces mención de unos temas pero no los desarrollas. Por ejemplo, al momento de hablar de la terminación del conflicto, pudiste haber dado las cifras de muertos, desterrados, inválidos que deja la guerra cada año, o el gasto militar, que es uno de los más grandes de América Latina, y muy superior a lo que se invierte en educación o salud. En resumidas cuentas, le faltó información a la infografía.
ResponderEliminarAlejo Baca